Hoy es uno de esos días diferentes, raros, que te dejan mal cuerpo. Nos pasamos todos los días discutiendo de fútbol, que si Mourinho habla demasiado, que si hay dopaje, que si el Barça no ganará la Liga…
Pero muchas veces, nos olvidamos de lo que realmente importa, las personas. Da igual un equipo que el otro, todos somos personas, con nuestras virtudes y con nuestros problemas. Porque hoy se ha publicado que Abidal sufre un tumor en el hígado, ahora, en su mejor momento de forma, de un día para otro, sin que nadie se lo espere.
El viernes será operado en Barcelona y se puede perder toda la temporada. El galo siempre ha destacado por su gran humildad y por su saber estar. Ahora más que nunca, todos tenemos que apoyar a Abidal. Porque lejos de lo que la gente cree, el “keniata”, como el apoyaban en Lyon por su gran condición física, es un tipo corriente, de barrio. Siempre ha sido consciente que sin el esfuerzo y sin el duro entrenamiento, no estaría donde está.
Y anécdotas sobre Abidal hay muchas, pero creo que hay una, que no es una muy conocida, pero refleja perfectamente su personalidad. Porque un día cualquiera, antes de que Abidal saltara a la fama, intentó entrar junto a sus amigos en El ‘Grand Café des Negociants’, uno de los restaurantes mas importantes de Lyon. Pero para sorpresa de Abidal, le negaron la entrada. Y la razón no fue otra que su color de piel. Eso se le quedó grabado a Abidal que años después volvió a El ‘Grand Café des Negociants’, esta vez para comprarlo. Ahora es el dueño del restaurante, fundado en 1864.
La vida da muchas vueltas, por ello, todos confiamos en su rápida recuperación. Cuando mejor estaba jugando, la vida ha decidido darle un pequeño revés, pero Abidal, de ascendencia africana, lleva en la sangre la palabra esperanza. !Ánimo Eric!
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